Se narra que cuando Shapur sasánida pasaba por una zona llamada Moradabad con la intención de luchar contra sus enemigos, vio a un anciano que le preguntó sobre su derrota o victoria en esta guerra. El anciano respondió a Shapur y le dijo que definitivamente ganaría esta batalla.
La mano del destino ayuda y en esa batalla, Shapur sale victorioso y va a agradecer al anciano por sus buenas noticias, pero antes de regresar a Moradabad, el anciano ya estaba muerto.
Para conmemorar y agradecerle, Shapur ordenó la construcción de una tumba sobre el sepulcro de ese piadoso anciano, y así se construyó la tumba de Pire (anciano) Moradabad.
Esta es la creencia general de la gente de Moradabad acerca de una tumba conocida por Pire Moradabad que les ha llegado de boca en boca. Sin embargo, debido a la falta de pruebas y documentos históricos, no parece muy acorde con la realidad.
El edificio que se ve hoy pertenece al período selyúcida y su altura alcanza los catorce metros. Se trata de un edificio de doce lados, todos los cuales se pueden ver desde el exterior y el interior de la tumba. Los doce lados están hechos con decoraciones de ladrillo girih y caligrafía Bannai en su fondo.
A cada lado de este edificio verás arqueados, y también existe un arqueado alto sobre la entrada de la tumba. Encima de la tumba se ha diseñado una gran cúpula con forma de huevo, de cinco metros de largo y de doble cara.
Dentro de la tumba hay escaleras que conducen al tejado y se puede ver dos lápidas decoradas con caligrafía y motivos cúfica.
Para ver esta tumba, recorra unos catorce kilómetros desde la carretera de Arak a Farmihan, en el lado derecho de la carretera llegará a la aldea Moradabad, donde se encuentra la tumba.