Según los documentos disponibles, el comienzo del tejido de alfombras en Mashhad fue probablemente en la era Safávida, y las tradiciones establecidas en el tejido, el diseño y el teñido continuaron hasta la era moderna. La expansión de la capital y las ciudades en la era Safávida aumentó la necesidad de alfombras y convirtió el tejido de alfombras en uno de los campos económicos más importantes. Además de Tabriz, los centros importantes de tejido de alfombras en la era de Safávida fueron las ciudades de Hamadan, Shushtar, Kashan y Herat. La fama de las alfombras de Khorasan es tan grande que durante la época de Shah Soleiman Safaví, de un total de veintiún caravasares importantes en Isfahán, había un caravasar de alfombras de Khorasan y Herat.

La fecha del inicio del tejido de alfombras en Mashhad, después de la extinción de la dinastía Safávida, no se conoce con exactitud, se afirma en algunas fuentes que considerando que la ciudad de Mashhad fue la capital de Irán en la era Afsárida, probablemente Nader Shah, trató personalmente de revivir la industria de las alfombras en Khorasan.

Desde el comienzo del período Qajar, hay poca evidencia sobre el tejido de alfombras, como si durante este período, Khorasan siguiera siendo un centro válido. La alfombra más antigua de Khorasan, que se conserva en la colección del santuario de Imán Reza, es una alfombra de la era Safávida. Esta hermosa alfombra tiene 34 metros de largo y su patrón está hecho de tallos de flores, hojas y patrones en espiral, algunos de que está tejido de flores con purpurina plateada.

El color del fondo es rojo y sus bordes son azules, tiene casi 160 años de antigüedad y se estima que la historia del tejido de alfombras en Mashhad es más o menos la misma. Un motivo específico que puede llamarse "el motivo central" dominó las alfombras tejidas a finales del siglo XVIII y principios del XIX.

Los elementos decorativos más efectivos del patrón se reúnen en el centro de la alfombra y convierte el fondo vacío en un elemento de color contrastante. Sin embargo, entre finales del siglo XIX y principios del XX, junto a estas alfombras, existen otras alfombras cuyos patrones repetidos, de forma coherente y relacionada, cubren toda la superficie.

En estas alfombras, a menudo tenemos macetas con flores, que se dirigen hacia la parte superior o hacia la parte inferior de la alfombra. Todos los colores utilizados en estas alfombras son de origen vegetal. Las alfombras de esta época tienen colores muy bonitos, los cuales son: rosa, rojo, tostado claro, azul, verde, amarillo y blanco.